Superhéroes: caricaturización del neoliberalismo

IAN ALEJANDRO LEPE QUIÑONES, 6o SEMESTRE, CCH NAUCALPAN

Capitán América: Civil War, Joe Russo y Anthony Russo, 2016

Es difícil describir el amplio mundo del cine de superhéroes, pero es aún más difícil determinar su propósito; esto es porque, al ser un subgénero derivado del cine de ciencia ficción y fantasía, está atado a cierto tipo de modelo.

Desde sus inicios, el cine ha intentado plasmar obras no audiovisuales con el fin de darle rostro a nuestras mas profundas fantasías y sueños. El cine de superhéroes, con sus múltiples adaptaciones de cómics, se ha consolidado como uno de los más rentables en todo el mundo; esto puede verse en los juguetes, videojuegos y sagas que inspira. Pero esta nueva ola de la época dorada de superhéroes en el cine (la primera fue en los 50´s y 60´s) se ha llenado de mensajes patrióticos norteamericanos relacionados con el neoliberalismo.

Piénsenlo. Toda película de superhéroes tiene siempre algo bueno que decir sobre la excesiva militarización de los Estados Unidos. Los superhéroes trabajan con y para el gobierno de los Estados Unidos de América y sus intereses políticos y bélicos y se asume que éstos representan los intereses de todos y cada uno de los ciudadanos del mundo. Lo gracioso es que, en la ficción, aunque la simple existencia de los superhéroes contradice la existencia de dios, éstos le son devotos.

Aunque el idealismo neoliberal norteamericano ha sido plasmado en infinidad de materiales audiovisuales, el más efectivo, sin duda, es el cine de superhéroes. Los fanáticos americanos se ven a sí mismos como seres superiores social, económica y políticamente, lo cual, en el cine fantástico, se representa de una manera más literal y física.

Pero esto no es exclusivo del cine. De hecho, los cómics de superhéroes se crearon principalmente para desprestigiar el comunismo y adoctrinar a la juventud con ideas capitalistas. El cine de superhéroes está lleno de simbolismos: los “superpoderes”, no sólo presentan seres superiores a otros, también representan el dinero y el poder al que “aspira” el neoliberalismo. Todos queremos ser superhéroes, pero por las razones incorrectas. A muchos niños les agradan estas películas, porque disfrutan ver a Spiderman salvar al mundo o cómo Superman vuela más rápido qué el sonido; para ellos el mensaje entre líneas no importa.

Para explicar mejor mi idea, analizaré los excesivos conceptos de patriotismo que existen en el universo cinematográfico de Marvel (MCU). La premisa de esta serie de películas es simple: seres con habilidades excepcionales deciden hacer “algo bueno” con sus dones. Existe, además, algo que todos los superhéroes tienen en común, y es que todos le rinden cuentas a su gobierno. Cabe mencionar que dicho gobierno que no titubearía en bombardear un país soberano; ese gobierno se autodenomina la capital del mundo, y hasta del universo.

Capitán América: Civil War, Joe Russo y Anthony Russo, 2016

Un buen ejemplo es Captain America: Civil War (2016). El grupo de superhéroes conocido como Vengadores recibe la orden de registrarse como un equipo bajo el mandato del gobierno estadounidense. La excusa para esto es que las acciones “heroicas” del grupo han costado millones de dólares en daños; sumado a esto, es dudoso su beneficio para los intereses del gobierno. Así, busca controlar las acciones de este grupo a través de un panel de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

Irónicamente es el Capitán América (quien lleva en su propio nombre el de su país) el único que objeta; su argumento es que, si los Vengadores aceptan, sus acciones estarán atadas a las ambiciones y motivos personales del gobierno. Ninguna acción heroica sería imparcial. El gobierno, con un arma como los Vengadores, podría llevar a cabo guerras contra todo país que no compartiera sus intereses políticos y económicos.

Lo que me llamó la atención de esta película, no fue la premisa, ya que es de esperarse de una película norteamericana de superhéroes. Lo que realmente llamó mi atención; fue la reacción del público, quien estaba a favor de que los Vengadores se convirtieran en una división de seguridad militar. La posición del Capitán America se justificaba, ya que, con los Vengadores bajo su mando, el gobierno podría decidir cuándo y a quién atacar; tendría el poder absoluto e incluso podría inventar los villanos a combatir.

En conclusión, tomando como ejemplo esta película, podemos ver que los superhéroes son el máximo exponente del neoliberalismo; a veces son tan sutiles los simbolismos, que pasan desapercibidos, y son simplemente percibidos como simples películas de ciencia ficción. Espero que como sociedad nos demos cuenta de lo que realmente representan esas películas que tanto vemos y amamos.